sábado, 28 de junio de 2008

DE MORIR A VIVIR HAY 0,5 PTOS. DE DIFERENCIA

Terminé, por fin acabó todo. Parecía que no iba a llegar nunca el fin de los exámenes, pero el caso es que ha llegado, ya soy un poco más libre (sólo un poco, y durante un tiempo).
¿Y qué he aprendido? ¿Realmente soy más listo/inteligente habiendo aprobado todas esas asignaturas? En teoría me tienen que haber transmitido conocimientos, para eso se supone que está la Universidad, para transmitir conocimientos. Pero realmente, ¿quién se enfrenta a una asignatura pensando en los conocimientos que va a adquirir? Nadie. Todos estamos más pendientes de aprobar el examen con la nota que sea (habrá quien se conforme con un 5 y habrá quien si no tiene más de un 9 no duerme tranquilo) que de ser conscientes de los conocimientos que nos van a transmitir y que nosotros vamos a adquirir.
Es triste, pero es cierto. Las asignaturas que nos van a "formar" no son más que pruebas que queremos quitarnos cuanto antes, y una vez hecho el examen, todos esos "conocimientos" que se supone que nos han aportado se esfuman sin más.
Es curioso que de haber aprobado el examen a haberlo suspendido hay muy poca distancia. Con un 5 serías considerado apto, pero con un 4,5 (0,5 ptos. de diferencia) no. Y ya ves tú de qué va a ser más listo/inteligente el del 5 que el del 4,5. ¿Realmente "sabrá" más el del 5 que el del 4,5? No. El conocimiento, el saber o no saber, es algo demasiado subjetivo como para objetivarlo con una cifra numérica, yo no me creo que sepa más alguien que ha sacado un 5 que alguien que ha sacado un 4,5. Sin embargo, de aprobar a no aprobar, de ser apto a no serlo, hay 0,5 puntos de distancia.
También entra en juego el factor "suerte". ¿Por qué habríamos de tener o no tener suerte en algo que se supone que está para evaluar los conocimientos? En el saber la suerte no influye para nada, por lo que no tiene sentido desearle suerte a alguien que se va a someter a una prueba de sus conocimientos. Sin embargo lo hacemos, deseamos suerte a nuestros compañeros que tienen un examen, del mismo modo que ellos nos la desean a nosotros. Esto es una prueba más de hasta qué punto la relación entre exámenes y conocimiento es casi inexistente.
Entonces, que no me vengan con el cuento chino ese de que en la Universidad me transmiten conocimientos y tal (ahora con el Plan Bolonia van a transmitir todavía menos), porque no me lo trago.
Desde pequeños se nos ha metido en la cabeza que tenemos que aprobar todos los exámenes que nos pongan. Para ser hombres de provecho. Y todo ello a partir de la "política del miedo". Se nos decía que tenemos que aprobar todo para tener un buen trabajo en el futuro, y poder llevar una vida digna. Pero tras esa promesa de un mundo de color de rosa de pan y miel que llegaría tras aprobar los exámenes, se escondía una vil amenaza: si no apruebas todo, vivirás mal, serás un mendigo y te morirás de hambre, porque no encontrarás trabajo con el que ganar dinero para comer. Era algo así como decir "si apruebas, vives; si suspendes, mueres", lo que vuelve a mostrar que la relación entre el saber y los exámenes y el sistema educativo en general, es prácticamente inexistente.
Si de vivir bien a vivir mal hay un aprobado de diferencia, y de un suspenso a un aprobado hay 0,5 puntos de distancia, que baje Dios y lo vea.

viernes, 27 de junio de 2008

El FÚTBOL ES EL OPIO DEL PUEBLO

Amigos, estamos todos aquí reunidos para salir de esta más que patética rutina de crisis económica y demás, y meternos esa espectacular y necesaria dosis de la droga que más nos altera y estimula, la cual nos llevará lejos de aquí, a un lugar donde todo es de color de rosa: el fútbol.
¡Que rule ese canutillo de Villa! ¡Trae pa acá esas alitas de Torres! ¡PODEEEEMOS! ¡Acércame esa jeringuilla, que me apetece meterme un buen chute de Güiza! ¡Pásame también esas tripis de Ramos y ese éxtasis de Xavi!
Tras haberse sometido los cabezas de balón a su sesión de drogadicción futbolera, salen a la calle con el pedo, ebrios de emoción roja, a olvidar lo triste que es su vida y la franca decadencia que su país (no así su selección) sufre. Conducen el coche a gran velocidad, pitando porque sí, sacando rojigualdas por las ventanillas y diciendo "¡Viva España!".
Y es que es increíble: si se trata de salir para una manifestación en protesta por una vivienda digna o por cualquier otra causa social, hay más antidisturbios que manifestantes. Ahora bien, como sea para festejar que España ha ganado un partido de fútbol y ha pasado a finales, se peta la calle.
Desde luego, el ocio mueve más que el deber como ciudadanos, y quizá sea por eso que estamos en esa crisis económica de la que pretendemos escapar a base de festejar la victoria de España.

PD: Añado a la sección OTROS BLOGS la página de El proyecto Matriz, donde se pueden encontrar varios artículos que contemplan muchos aspectos del mundo que nos ha tocado vivir desde un punto de vista bastante crítico. También añado a la sección de IZQUIERDA ABERTZALE la página de conflicto-vasco.com, que contiene interesante material acerca de la situación que se vive en el País Vasco. en la sección de VIDA ALTERNATIVA he colgado la página de la Coordinadora para la prevención de la tortura, y en DOCUMENTOS INTERESANTES he puesto un pdf de Joaquim Vergés i Jaime acerca de La política de pirvatización de las Empresas públicas.

viernes, 20 de junio de 2008

DEFENDER LO MÍO

Normalmente, cuando uno está discutiendo con alguien acerca de si en Venezuela hay democracia o no la hay, y uno se posiciona a favor del "sí", tarda poco en saltar el listillo que suelta la famosa y extendida frase: "Pues si tan democrática te parece Venezuela, vete a vivir allí". Del mismo modo, cuando de lo que se trata es de criticar el régimen español, salta el mismo listillo diciéndote que "te vayas de España, si tan anti-democrática te parece".
Tengo que hacer alguna que otra objeción a la gente que así piensa. Para empezar, uno no vive en un país determinado en función del régimen que en él haya establecido. Aunque yo considere que España es un país no-democrático, no tengo por qué irme a vivir a otro sitio. No se trata de "huir" de un sistema que no te gusta, sino de hacer por cambiarlo desde dentro, con los métodos que consideres convenientes. Otra cosa distinta es que te tengas que ir de tu país debido a la represión que en él se ejerce, como ocurrió en España misma, en el 39. Pero aún así, hubo gente que se quedó, porque consideraban que España era su tierra, y no iban a permitir que un tirano con bigote se la arrebatara. Lamentablemente, esta historia tiene triste final: cuarenta años de dictadura franquista.
Lo que quiero decir es que un país es algo más que un régimen político. Un país son tus amigos, tu familia, tu gente, tu barrio, tu vida. Un país es algo muy subjetivo como para meterlo dentro de unas fronteras y aplicarle una Constitución y unas leyes. Aunque viva en un régimen que considero no-democrático, no me gustaría irme a vivir a otro país con un régimen más democrático que el español, porque no tendría a mis amigos, mi familia, mi barrio. En definitiva, no tendría mi vida. Por eso no estoy de acuerdo con esos que afirman lo de que "si tanto te gusta Venezuela, vete a vivir allí", o lo de que "si no te gusta España, vete de ella". No, mira, no me voy a ir de ella. Me voy a quedar a tratar de convertirla en algo más acorde con mis ideas y con mi forma de ver el mundo. Porque en España tengo mi vida, y por el mero hecho de que vengan a tratar de pisotearla no me voy a ir permitiendo que la pisoteen a su gusto. Me quedaré a defenderla, y para ello tendré que criticar el régimen español, que es quien ataca lo mío.

viernes, 13 de junio de 2008

HUEVOS EN AGUA TEMPLADA

España está en huelga. Bueno, no toda, pero no sería descabellado pensar que esto va directo a una huelga general. El otro día, hablaba con dos amigos sobre la huelga de transportes, en la que varios camioneros se han parado en las carreteras de España, bloqueando el tráfico para exigir una tarifa mínima y el gasoil profesional.

Uno de mis amigos me decía que no se puede establecer una tarifa mínima, ya que los precios no los regula el Gobierno, sino el mercado, y tenía razón. En el sistema económico actual, no puedes establecer por ley que un determinado producto cueste X cantidad. Mi otro amigo le decía que entonces vaya una mierda de sistema en el que vivimos, donde alguien trabaja por debajo del precio de coste y no se puede hacer nada. El otro asentía como diciendo "sí, tienes razón, pero las cosas son así. Y gracias a que las cosas son así nos libramos de precios abusivos en otros productos. Gracias a la competencia. Por tanto, el Gobierno no debe intervenir en la economía, y hay que dejar que ésta siga su curso". Mi otro amigo le replicó que también gracias a la competencia, al llamado libre mercado y a que las cosas sean así, existe una gran desigualdad entre los habitantes del planeta, ya que millones de personas viven en la más absoluta pobreza y se mueren de hambre a día de hoy. Mi primer amigo volvía a asentir diciendo que efectivamente era una putada, pero que no se podía hacer nada, y que había que aceptar esa desigualdad como algo inevitable.

Vaya. Así que tenemos que aceptar la desigualdad y la inanición mundial porque son consecuencias que trae el maravilloso "libre" mercado, y claro, éste no lo vas a sacrificar, ¡por Dios! Pensé que, si tenemos que aceptar la desigualdad y la pobreza en el mundo, también tendremos que aceptar todos los conflictos sociales que nacen a raíz de esa desigualdad y esa pobreza. A saber, robos, asesinatos, atracos, narcotráfico, prostitución,...No podemos pretender elegir algo sin atenernos a las consecuencias que nuestra elección pueda tener. Por lo que si aceptamos el "libre" mercado, tendremos que aceptar también esa desigualdad y esa pobreza, y del mismo modo tendremos que aceptar los conflictos sociales ya mencionados.

Me viene a la cabeza una especie de metáfora para explicar lo que sucede: Imaginemos que tenemos una cacerola con agua hirviendo y, dentro de la cacerola, sumergidos en el agua hirviendo, tenemos cuatro o cinco huevos. Hay que coger los huevos, porque son nuestro único alimento, y sólo los podemos coger con las manos. Si los queremos coger nos tendremos que quemar. Mi primer amigo diría que es una putada, sí, pero no se puede hacer otra cosa si lo que pretendemos es alimentarnos. Mi otro amigo diría que entonces, vaya mierda de sistema, en el que para poder comer tienes que asumir sacrificios. Mi primer amigo le replicaría, "¿entonces qué hacemos, no metemos la mano y nos quedamos sin comer?", y yo, posicionándome más próximo a mi segundo amigo le contestaría: "No, claro que hay que meter la mano para sacar los huevos, pero lo que está mal y hay que arreglar es el hecho de que el agua esté hirviendo".

No podemos seguir manteniendo un sistema económico en el que la pobreza y la hambruna mundiales sean dos premisas inamovibles para que ese sistema se mantenga. Sería bueno plantearse si nos interesa mantener este capitalismo salvaje de agua hirviendo, o si por el contrario, nos conviene más enfriar un poquito el agua para que esté más templada y podamos sacar los huevos a gusto, sin asumir ningún riesgo humano.


PD: Añado los blogs del Colectivo Contra Coca-Cola, dedicado a denunciar las prácticas de la multinacional; El Percal, un boletín informativo desde la calle; y el de Teodoro Santana, de tendencia comunista. Además, el blog de CNT Enseñanza será cerrado próximamente, y se ha creado una web donde continuarán su labor de información. La web se puede encontrar en la sección de ANARQUISMO, donde también he colgado el número 2 de Tinta y Libertad.
En la sección de DOCUMENTOS INTERESANTES he colgado un pdf de El Percal, donde, entre otras cosas hablan de la crisis económica y las VPO.

lunes, 9 de junio de 2008

TUENTI (II)

Dos amigas hablando:
- ¡Tía, qué fuerte!
- ¡Qué, tía! ¡Cuenta, cuenta!
- Pues verás. El otro día, que estoy con la Vane por el Messenger ¡y a qué no sabes lo que me enseña, tía!
- ¡¿Qué?, ¿Qué te enseña?!
- "Pos ná", va y me dice que han inventado una cosa nueva para poder ver a tus contactos y hablar con ellos. Pero no verles como en el Tuenti, sino como en tres dimensiones, ¿sabes?
- ¡Qué fuerte, tía! ¿Y cómo hacen eso?
- "Pos" no sé, tía, pero el caso es que lo han sacado. No me acuerdo muy bien de cómo se llamaba...emm...Dorreal, o algo así. Murreal, es que no me acuerdo muy bien de cómo se llama. Pero que es como Tuenti, y cómo el Messenger, solo que en vez de sólo comunicarte o ver a tus contactos, ¡también les puedes tocar, tía!
- ¡Ostras, tía!
- ¡Ah, sí, ya me acuerdo! ¡Se llama "Mundo Real"! ¡Vaya nombre, eh!
- ¡Y que lo digas tía, suena muy raro eso de Mundo Real! ¿Qué será?
- ¡"Pos" lo que te estoy diciendo, tía! Que tú no sólo te comunicas con tus contactos escribiéndoles mensajes, sino que también les puedes tocar, acariciar, abrazar,...
- ¿Y cómo haces eso, tía? ¡Si está la pantalla de ordenador en medio!
- ¡Es que eso es lo fuerte, tía, que en el Mundo Real no necesitas ordenador para comunicarte con tus contactos!
- ¡¿Cómo dices?! ¡¿Que no necesitas ordenador?! ¡Y cómo te comunicas entonces!
- Pues verás, es que Mundo Real tiene una opción que te permite comunicarte con tus contactos sin necesidad de un ordenador. Se llama "Hablar".
- ¿Hablar? ¡Dios mío, qué raro suena! ¿Y en qué consiste eso de Hablar? ¿Es con el ratón, o qué?
- ¡No, no, tía, no se usa ni el ratón ni el teclado!
- ¿Sin ratón y sin teclado? ¿Y cómo te comunicas entonces?
- ¡Pues con una cosa que se llama "sonidos fonéticos"!
- ¿Sonidos fonéticos? Dios mío, todo me suena a chino. ¿Y en qué consisten esos sonidos fonéticos?
- Pues por lo que me ha contado la Vane son ruidos que se hacen con la boca, y que los usas para comunicarte con tus contactos, y que no necesitas pantalla, ni ratón, ni teclado ¡ni nada!
- ¡Joé, qué raro suena todo eso del Mundo Real, y lo de Hablar y no sé qué! Es mucho más cómodo Tuenti y el Messenger, no tiene tanta complicación.
- Ya, ¡pero en el Mundo Real puedes mirar desde varios ángulos! ¡Si te digo que está en 3D!
- ¿Y eso cómo lo haces?
- Es que Mundo Real tiene otra opción, que es "Caminar".
- ¿Caminar?
- Sí, y consiste en que te desplazas, pudiendo ver más de un ángulo. Puedes ver zonas de tus contactos que en Tuenti o Messenger no puedes ver. Y además eso no es todo. Al contrario que en Tuenti, ¡el Mundo Real NO está compuesto por unos ni ceros!
- ¡¿Cómo?! ¡Eso ya sí que no me lo creo! ¡Cómo no va a haber unos y ceros! ¿Entonces cómo puedes ver a tus contactos? ¿De qué está constituido el ambiente en el Mundo Real, si no es por unos y ceros?
- Pues, entre otras cosas, el Mundo Real tiene oxígeno.
- ¿Oxígeno?
- Sí, aire, y los usuarios del Mundo Real lo respiran.
- ¡Joé, qué raro es eso del Mundo Real!
- "Pos" podríamos probarlo tía. ¿No te raya ya tanto el Tuenti y el Messenger? Además, en el Mundo Real no sólo ves a tus contactos, sino que ves a un montón de gente que está en la misma zona que tú. Porque Mundo Real es muy grande, tan grande que está dividido en países, cada país está dividido en ciudades, y cada ciudad está dividida en barrios. Cada barrio está dividido en calles, por las que tú te puedes mover, y te vas cruzando con otros usuarios del Mundo Real.
- ¿Sin tenerles agregados?
- Claro. Aunque en el Mundo Real no lo llaman "agregarlos", sino que lo llaman "conocerlos", supongo que por temas de copyright y demás.
- ¿Pero los usuarios que no tienes agregados también te pueden tocar?
- Sí, claro.
- ¡Joder! ¡Pues qué peligroso, ¿no?!
- ¿Peligroso por qué?
- ¡Joé tía, "pos" porque sí! Porque si cualquiera te puede tocar o mantener contacto contigo...No sé, tía, a mí no me convence. Yo prefiero estar tranquilita y a salvo con mi ordenador en casita. ¡Donde estén el Tuenti y el Messenger que se quite el Mundo Real!

PD: Añado a la sección de VÍDEOS Y DOCUMENTALES tres vídeos de Venezuelanalysis acerca de lo que se ha dado en llamar "proceso revolucionario" en Venezuela, con el presidente Hugo Chávez en el poder.
También, en la sección de VIDA ALTERNATIVA he colgado un link a la página de SinPermiso, una publicación de orientación socialista.

viernes, 6 de junio de 2008

¿RACISMO EN LA BATALLA DE GALLOS?

El otro día comentaba con un colega esta batalla:


Es MC Klopedia contra Zarro, y se celebró en el Cultura Urbana de Madrid de este año. Lo que discutíamos mi amigo y yo es el tema del racismo. Al inicio de la batalla, en la primera intervención de Zarro, se puede ver cómo éste le dice a MC klopedia (de origen venezolano) cosas como "te voy a hacer una pregunta, ¿acaso tú tienes papeles?", "cojo el móvil y ahora llamo a los de inmigración", "he venido en coche y este cabrón en cayuco", además de otras frases relacionadas con la nacionalidad de MC Klopedia. El debate giraba en torno a si es lícito meter insultos racistas (no estoy diciendo que Zarro, como persona, sea racista, pero desde luego que sus insultos sí que lo eran) en las batallas de rap.
Vamos a ver, ¿para qué se presenta uno a una batalla de rap de estas características? Para humillar al otro, punto. No se presentan ni para ver quién rima más con "fregadero", ni para ver quién mete más contenido social, ni para ver quién rima más con cosas relacionadas con determinados objetos. Para eso hay otro tipo de batallas. En la Batalla de Gallos se presentan para ver quién humilla más a su contrincante, y el que haya sido más humillado será el perdedor, mientras que el que más humille será el ganador, no hay más.
Entonces, teniendo en cuenta esto, ¿por qué no va a ser lícito tratar de humillar a alguien haciendo comentarios sobre su color de piel o su país de procedencia? ¿No se meten algunos con las madres, con el peinado del contrincante, y hasta con su forma de vestir (cuando van todos vestidos de forma muy similar, por cierto)? ¿Entonces por qué el color de piel iba a ser menos?
Zarro tiene todo el derecho del mundo a meterse con MC Klopedia por su origen. MC Klopedia se presenta a la batalla sabiendo a lo que se expone, sabiendo que va a humillar, pero que también va a ser humillado. No podemos pretender que se celebren batallas en las que se puedan decir unas cosas y no otras. ¿Querías beef? ¡Pues toma beef! Es como si yo soy rubio y me molesta que se metan conmigo (en una batalla de rap, se entiende) haciendo comentarios jocosos acerca del color de mi pelo. No me queda más que joderme. Si te molesta que se metan contigo, lo último que debes hacer es presentarte a la Batalla de Gallos.
No obstante, del mismo modo que MC Klopedia sabía a lo que se exponía, también lo sabía Zarro al emplear insultos racistas contra el venezolano. Sabía (o debería saber) que ese tipo de insultos no sólo iban a molestar a MC Klopedia, sino quizá a gran parte del público. Incluso el jurado y el propio Mbaka podían también verse molestos. De ahí el clarísimo rechazo que experimentan sus rimas frente a las de MC Klopedia, que al final le llevaron a perder la batalla.
En mi opinión también ganó MC Klopedia, y por una sencilla razón: aún estando condicionado a hablar de un determiando tema debido a la primera intervención de Zarro, fue capaz de contestarle y de dejarle por los suelos. Para mi gusto, las rimas no eran tan buenas como las primeras de Zarro, pero sólo por haber sabido contestarle con el tema que Zarro propuso, merecía ganar. Y, efectivamente, así fue.

jueves, 5 de junio de 2008

ERES EL PROTAGONISTA DE TU VIDA

Hoy te despiertas, con sueño, como todas las mañanas, y te vas a la cocina a desayunar como todas las mañanas. Tienes una vida medida al milímetro, estudias para asegurarte un futuro, haces las cosas que haces pensando en el futuro.
Frente a tí tienes la caja de cereales. Está ahí, donde está siempre, donde está todas las mañanas. Al igual que la tostadora, la silla, la mesa. Todo está donde está siempre. Terminas de desayunar y sales de casa camino a la universidad. Los cubos de basura están donde están siempre, todas las mañanas están ahí, como si te estuviesen esperando, al igual que el kiosquero, que está donde todas las mañanas (en el kiosco) haciendo lo de todas las mañanas (vender periódicos). Las hojas de los árboles son movidas por el viento, como todas las mañanas; se oye cantar a los pájaros, como todas las mañanas; las señoras van con el carrito de la compra, se cruzan, se sonríen y se preguntan "qué tal", como todas las mañanas. Parece que los días son fotocopias unos de otros. Parece que toda esa serie de fotocopias transcurre ante tí para que tú la veas. Te hace sentir protagonista. Esos días van pasando como fotocopias ante tí, y tú simplemente te limitas a mirarlos, a verlos pasar, como un espectador que ve una película. Con la diferencia de que en la película que estás viendo tú, todos los fotogramas son exactamente iguales, en nada se diferencian unos de otros: los cereales, la tostadora, los cubos, el kiosquero, las señoras,...todo es igual.
Y tú desde pequeño te has ido sometiendo a pruebas. Pruebas que, en teoría, te han permitido seguir adelante con tu vida. ¿Recuerdas cuando en el patio del recreo te preocupabas por aquel control de Conocimiento del Medio que tenías inmediatamente después? ¿Te acuerdas cuando acudías a los entrenamientos de fútbol los martes y los jueves, y lo nervioso que estabas cuando te tocó jugar tu primer partido? ¿Recuerdas cuando quedabas con tus amigos y os pasabáis la tarde jugando en la calle, y te preocupabas por lo que te fuese a decir tu madre por lo tarde que llegabas a casa?
Has seguido superando pruebas, aprobando exámenes, haciendo lo que te dicen tus padres porque sabes que ellos sólo quieren lo mejor para tí. Te han dado una vida que ya está escrita, tú simplemente te estás limitando a cumplir con el guión. Toda tu vida está programada, eres el protagonista de ella, todo lo que te pasa está escrito, alguien ha decidido que las cosas han de suceder así, y así es como sucederán. Tú sólo tienes que dejarte llevar. Parece que TODO lo que te rodea es un simple decorado de escenario hecho a tu medida, para que tú te desenvuelvas en él. Los cereales, la tostadora, los cubos de basura, el kiosquero, las señoras,...Todos ellos son simples elementos del decorado en el que tú te mueves. Todo te parece programado para que suceda como tiene que suceder.
Sin embargo, un día cualquiera, como tantos otros, sales a la calle y, tras haber pasado por delante de los cubos de basura, te dispones a cruzar la calzada. En el momento en el que estás cruzando, un coche que va demasiado rápido como para verte te atropella sin más, con un golpe seco en las piernas, que te envía unos metros más hacia delante, golpeándote la cabeza contra el asfalto y quedando desangrado en el suelo. Estás muerto.
Ya no existes, se acabó, estás muerto. Al día siguiente, un día como otro cualquiera, la caja de cereales sigue ahí, donde siempre; al igual que la mesa, la silla y la tostadora. Tu entrenador de fútbol sigue entrenando a chavales, tu profe de Conocimiento del Medio sigue poniendo controles a otros niños. Los cubos de basura siguen donde siempre, el kiosquero sigue donde siempre (en el kiosco), haciendo lo de siempre (vender periódicos); las hojas se siguen moviendo como todos los días, los pájaros siguen cantando como todos los días y las señoras se siguen cruzando por la calle y preguntándose "qué tal". Como todos los días. Todos los elementos del decorado siguen ahí, donde todos los días, con la única diferencia de que tú ya no estás entre ellos, estás muerto. Pero ellos siguen ahí, aún sin tí siguen ahí. Los cereales, la tostadora, los cubos, el kiosquero, las señoras, tu entrenador,...todos siguen ahí. Es entonces cuando entiendes que, en realidad, tú no eras el protagonista de tu vida, sino que también eras parte del decorado.