martes, 26 de febrero de 2008

RAJOY Y ZAPATERO. EL DEBATE.

Como no podía ser de otra forma, hoy voy a hablar del "debate" (más adelante explicaré las comillas) celebrado ayer entre los dos principales aspirantes al Palacio de la Moncloa: José Luis Rodríguez Zapatero, del PSOE; y Mariano Rajoy, del PP.
Lo primero que me gustaría decir es que no me pareció un debate propiamente dicho. Más bien eran dos mítines controlados al milímetro: Rajoy sacaba una gráfica que dejaba en mal lugar a Zapatero y éste hacia lo mismo con Rajoy sacando otra gráfica que (se supone) le contradecía. Lo cierto es que al ciudadano de a pie, que estuvo anoche frente a la caja tonta viendo el pseudo-debate, de poco le servirían dichas gráficas, pues no tenía acceso a la fuente original que aportaba dichos datos, por lo que no podía contrastarlos y comprobar su veracidad.
Otra cosa que a un servidor le puso muy nervioso es ese discurso de "intro" y "outro" que se marcaron ambos "púgiles" políticos al principio y al final de dicho debate. Cuando nada más empezar ví que don Mariano Rajoy se ponía serio, "sincero", mirando a la cámara como el Rey en Navidad, soltando un discurso que sonaba preparadísimo (no me parece mal que estuviese preparado, es más, lo veo lógico, pero sí me molestó que se notase tanto), no sabía si reírme tontamente o deprimirme, apagar la tele malhumorado e irme a dormir. Opté por la primera opción: me reí tontamente. Me pareció tan artificial, que mis expectativas por ver un debate entretenido se vieron disipadas.
En mi opinión, el debate lo ganó Zapatero, aunque no por mucho, todo hay que decirlo. A mí por lo menos me consiguió transmitir mayor confianza. Eché de menos, además, más propuestas por parte de ambos dirigentes, ya que únicamente se dedicaban a criticar lo que había hecho cada uno estando en el Gobierno. "¡Usted ha logrado que España sea un coladero para inmigrantes!", decía uno, "¡No, eso lo ha hecho usted!", replicaba el otro, ¡"Usted ha sido, le digo!" volvía a replicar el primero, y así sucesivamente. Esto pude apreciarlo sobre todo en el candidato socialista, que cada dos por tres interrumpía con diversos "¡Usted!" a Rajoy cuando éste estaba criticando su gestión en el Gobierno.
El momento más tenso y de mayor interés (si es que el tan absolutamente coñazo-debate tuvo alguno) fue cuando ZP le echó en cara a Rajoy el haber llamado "huntados" (Zapatero lo reiteró varias veces) a los representantes de la cultura española, en alusión a los miembros de la Plataforma de Apoyo a Zapatero (PAZ). Para Rajoy, eso fue un crochet verbal en toda la mandíbula, y pudo verse en lo desencajado que se le quedó el rostro ante tal acusación. Con cara de decepción y ofendido, el líder popular le dijo a Zapatero algo así como "¡¿Yo he dicho eso?!", y posteriormente Rajoy devolvió el golpe al presidente con un directo acojonante: acusó a Zapatero de haber "agredido" a las víctimas del terrorismo. Zapatero lo negó, dijo que no podía admitir semejante afirmación y le pidió a Rajoy que retirara esa acusación. Rajoy no lo hizo. Respecto a este tema, ya hay algunos que se han pronunciado.
Para rematar la faena quedó ese discurso sentimentaloide con el que Rajoy finalizó el debate. Habló de una hipotética niña (niña; no niño, no sé por qué, por jugar a los feministas quizás), que le gustaría que naciera en un país libre, donde se respetaran los derechos humanos y no se qué movidas cursilonas y demagógicas más. Pero lo que me dejó patidifuso fue la recta final de ZP. Me sorprendió por sus últimas palabras: "Buenas noches, y buena suerte". ¡¿A qué coño venía semejante gilipollez?! Esa frase es famosa (al menos yo la conozco de ahí) por la película de George Clooney que lleva ese mismo título "Buenas noches, y buena suerte", que cuenta la historia de un periodista de televisión al que el senador McCarthy le hace la vida imposible en plena Caza de Brujas por ser sospechoso de comunista. Dicho periodista siempre finalizaba sus emisiones con esas palabras mágicas: "Buenas noches, y buena suerte". Lo que no sé es a qué venían en boca de Zapatero. ¿Acaso hay alguien que le persigue por ser comunista?
En definitiva, el debate fue generalmente aburrido, con un montón de cifras y porcentajes que quedaban en nada y se disolvían en el aire. Si el próximo debate, que creo que es el 3 de marzo, va a ser igual de "emocionante" que éste, creo que no me reiré tontamente, sino que, este vez sí, me deprimiré, apagaré la tele malhumorado y me iré a dormir.
PD: Como anécdota me gustaría comentar lo curioso que me pareció que Zapatero se realzara las cejas en forma de triángulitos (^^). ¡Lo que hace el márketing!

lunes, 25 de febrero de 2008

31 OJOS TE VEN

¡Ay amigo ciudadano! ¿Creía usted que iba sólo, que pasaba desapercibido y nadie le tenía en cuenta? ¿Se sentía usted uno más entre la muchedumbre en cuya presencia nadie repara? ¡Se equivocaba! Desde hoy 31 cámaras le ven, le observan, controlan cada uno de los movimientos que usted hace. Pero no se preocupe, lo hacen por su seguridad, para que pueda vivir en "libertad". Esas cámaras le protegen, puede estar tranquilo a partir de ahora.
Sí, señores, hablo de la última maravilla en pro de la seguridad que se les ha ocurrido a nuestros amigos, los duendecillos del consistorio madrileño. No obstante, calmémonos, porque Pedro Calvo, el delegado de seguridad, ha dicho que se "preservará siempre la intimidad de los viandantes". ¡Caramba! ¿y hasta qué punto ésto puede ser cierto? Si voy por la calle y la cámara me enfoca, "alguien" me está viendo por cojones. Claro que, si mi actitud no es "sospechosa", no tengo nada de lo que preocuparme, pero ¿y si lo es? ¿Quién determina lo que es sospechoso y lo que no lo es? El caso es que nos van a vigilar, pero ya nos han garantizado que nuestra intimidad no será violada. Y claro, habiéndonos dicho ésto la gente ya puede dormir tranquila. A tí te dicen que comer un producto al que eres adicto es malo para tu salud y te alarmas, te pones nervioso, te lo piensas dos veces antes de comer dicho producto. Pero basta que salga algún cantamañanas en bata blanca y con aspecto de sabio que te diga "es mentira, el producto está en perfectas condiciones, puede usted comerlo tranquilo" para que acto seguido empieces a engullirlo sin la menor preocupación.
Siempre buscamos justificaciones para nuestros actos, para hacer lo que realmente queremos. Incluso a sabiendas de que estamos haciendo algo mal, buscamos por todas las maneras posibles "algo" que justifique nuestra conscientemente mala acción. Por ejemplo, le ponemos los cuernos a nuestra novia. Sabemos que está mal, no deberíamos haberlo hecho y nos sentimos en cierto modo culpables. Pero en seguida, como por arte de magia, aparecen en nuestro interior vocecillas que nos susurran algo así como "no has hecho hada malo, ¿quién te dice que en estos momentos no está ella haciendo lo mismo?", y ese sentimiento de culpabilidad se disuelve en el aire, y proseguimos con nuestra malvada acción cargada de alevosía.
Pues con lo de las cámaras (ojos que te ven) pasa algo parecido. Nos han dicho que nos van a vigilar, y sabemos que eso es malo, no nos gusta un pelo, pero ya ha salido el sabiondo de la bata blanca (en este caso don Pedro Clavo, delegado de seguridad) para decirnos que se "preservará siempre la intimidad de los viandantes", con lo que esa acción que no nos gusta un pelo y que sabemos mala, queda felizmente justificada, la gente se tranquiliza y todo sigue con normalidad. Las personas saben que están siendo vigiladas, que el ojo les ve, pero lejos de estar inquietos, están felices, viven tranquilos...¡se sienten libres!
¡Feliz 1984!

miércoles, 20 de febrero de 2008

TELE-MORBOSA EMITIENDO

Presentadora: ¡Hola, muy buenas noches y bienvenidos una vez más a Tele-Morbosa! En el programa de hoy hablaremos con Rosalía, una mujer luchadora a quien la vida ha tratado mal. Tras pasar una durísima infancia marcada por el maltrato y posterior abandono de sus padres, Rosalía fue creciendo y haciéndose a sí misma en una vida marcada por la más triste de las soledades. Encontró a Ramón, alguien que durante un tiempo fue su príncipe azul, hasta que en un arrebato de ira suscitado por un ataque de celos incontenible, éste le propinó a Rosalía una brutal paliza que daría pie a muchas otras más, una de las cuales le dejó a la pobre en esa silla de ruedas con la que hoy nos acompaña. Todo esto será en unos minutos, después de la publicidad. Recuerden que pueden participar en nuestro concurso de hoy y ganar esos 3.000 € que tanta falta les hacen con sólo llamar al número que aparece en pantalla y contestar a esta sencillísima pregunta: "¿Con cual de los siguientes instrumentos suele pegar Ramón a Rosalía?". Tienen tres opciones:
Opción A: Un bate de béisbol.
Opción B: Un martillo.
Opción C: Un trozo de tubería oxidada.
¡Llame ahora, esos 3.000 € están esperándole sólo a usted! ¡No pierda esta fantástica oportunidad! ¡Unos minutos de publicidad engañosa y volvemos! ¡No se vayan!
(Tras MUCHOS minutos de publicidad engañosa de juguetes sexistas y violentos, y productos de limpieza anunciados por mujeres que bien podrían ser actrices porno, Tele-Morbosa reanuda su emisión)
Presentadora: ¡Buenas noches y bienvenidos de nuevo! Como les decía antes de publicidad, nos encontramos con Rosalía, una mujer con una vida tristísima que, seguro, nos hará reír en casa a toda la familia. ¡Buenas noches Rosalía! ¿Cómo estás?
Rosalía: Hola Presentadora. Antes de nada, quería agradecer a Tele-Morbosa lo mal que me están tratando y lo difícil que me están haciendo la existencia. Sin vosotros no sé qué sería de mí.
Presentadora: ¡No hay de qué, Rosalía! ¡En Tele-Morbosa estamos para eso, para hundirte la vida y amargártela a más no poder simpre que a nosotros nos dé la gana! ¡Es un placer tenerte aquí para reírnos de tí! Cuéntanos Rosalía, ¿cómo de triste fue tu infancia?
Rosalía: Bueno, pues verás. Mi padre era alcohólico, y mi madre se prostituía (carcajadas del público y de la presentadora). No nos llegaba el dinero para vivir, y mi padre lo pagaba conmigo azotándome con un bate de...
Presentadora: ¡No des pistas para el concurso, Rosalía!
Rosalía: ¡Uy, es verdad, perdón!
Presentadora: Es igual, sigue.
Rosalía: El caso es que mi padre me golpeaba todos los días. Lo hacía muy fuerte, y me decía que no servía para nada.
Presentadora (riéndose): ¡Hombre Rosalía, no dirás que en esto último no tenía razón! ¡Que vas en silla de ruedas, y eso de poco sirve (aplausos y risas del público ante el chiste)!
Rosalía (roja de la vergüenza): Sí, bueno, sí.
Presentadora: Dejemos de lado tu infancia, Rosalía, que lo cierto es que nos aburre un poco, y pasemos a cosas más interesantes. Háblanos de Ramón.
Rosalía: Bueno, Ramón, yo le conocí en una discoteca. Estuvimos viviendo juntos durante un tiempo y pasados unos años me casé con él.
Presentadora: Y fue entonces cuando te empezó a pegar, ¿no?
Rosalía: Sí.
Presentadora: ¿Cómo te pegaba?
Rosalía: Pues me tiraba al suelo, me cogía de los pelos, me echaba la cabeza hacia atrás y me escupía en la boca. Después me pegaba patadas en la cabeza.
Presentadora: Ah, bueno, pues por lo menos puñetazos no te pegaba, tampoco es para tanto (leves risas y gestos de asentimiento por parte del público).
Rosalía: Ya bueno, es que decía que no le apetecía mancharse las manos de sangre, ¿sabes?
Presentadora: Claro, porque supongo que con las patadas ya te dejaría hecha un Cristo ¿no?...
Rosalía: Claro...
Presentadora: Entiendo...¿Y cómo fue lo de la silla de ruedas?
Rosalía: Bueno, eso fue una vez que había discutido con él. Me había golpeado mucho, casi no podía mantenerme en pie...
Presentadora: ¡Espera Rosalía, porque nuestro equipo de investigación se acercó al lugar de los hechos y, al igual que nosotros en plató, ustedes en casa también podrán ver cómo sucedió todo. ¡Dentro vídeo!
(Aparece en pantalla un vídeo de cámara oculta que muestra cómo Ramón agarra a Rosalía con la mano izquierda por el cuello mientras le golpea duramente con el puño derecho. Tras empujarla, Ramón le pega una fortísima patada en la espalda que lleva a Rosalía de bruces contra el suelo. Entre insultos poco entendibles (por lo que los subtitulan) y escupitajos, Ramón coge a Rosalía de la pechera y la saca al rellano, donde la tira escaleras abajo, oyéndose un ruido estrepitoso. Se acaba el vídeo.)
Presentadora: Bueno Rosalía, fué así como sucedió, ¿verdad?
Rosalía (llorando y enfocada en primer plano, con música sentimental de fondo): ...sí...
(Aparece bajo el primer plano de Rosalía el siguiente rótulo: "No sabe que Ramón está aquí").
Presentadora: ¡No te preocupes, Rosalía, porque hay alguien que se ha puesto en contacto con nosotros para darte una sorpresa!
(Rosalía levanta la vista inundada en lágrimas)
Presentadora: ¡Mira a esa pantalla, Rosalía!
(En la pantalla aparece Ramón con un mensaje para Rosalía)
Ramón (en una pantalla): Rosalía, soy yo, Ramón. Estoy aquí para decirte que lamento mucho no haberte hecho más asqueroso tu paso por este mundo. Que si por mí fuese ya estabas muerta, y así ya me ahorraba tener que bajarte y subirte cada dos por tres de esa silla de ruedas que llevas. Pero sobre todo he venido porque no tengo suficiente con humillarte en privado, y quiero hacerlo en público, para lo que he escogido Tele-Morbosa.
Presentadora: ¡¿Qué, Rosalía? ¿Dejamos pasar a Ramón?!
Rosalía: Sí, vale...
Presentadora: ¡Que pase Ramón!
(Acompañado por una música pegadiza entra Ramón en plató, andando como si estuviese en una silla de ruedas, parodiando la situación en la que se encuentra Rosalía, lo que hace reír fuertemente al público. Rosalía también ríe, aunque algo molesta por el gesto de Ramón. Ramón se sienta junto a Rosalía, en un sillón aparte)
Presentadora: ¡Buenas noches Ramón!
Ramón: Buenas noches Presentadora.
Presentadora: ¡Bueno, ya te hemos visto en acción hace unos minutos! ¡Cómo pegabas a Rosalía, con qué fuerza!
Ramón: Sí, bueno...
Presentadora: Increíble...Bueno, Ramón, cuéntanos ¿Qué sentías cuando pegabas a Rosalía?
Ramón: ¿Que qué sentía? Bueno, "pos" al principio satisfacción, ¿no? Tú veías que la pegabas y raca y raca, y que ella lloraba y sangraba y claro, tú te partías ¿no? Buaf!, luego ya me cansaba, porque acababa con los brazos "reventaos" ¿sabes? Pero bueno, ahí estábamos, dale que te pego...
Presentadora: Ya...bueno, Ramón, aquí en el público hay una señora que te quiere hacer una pregunta, escúchala.
Ramón: A ver...
(Una señora del público de unos sesenta años se pone en pie y una azafata le acerca un micrófono para que se le oiga bien. Se dirige a Ramón.)
Señora: Señor Ramón, cuando antes Rosalía ha dicho que usted no le pegaba puñetazos porque entonces se manchaba las manos con la sangre que ya le había hecho dándole patadas, ¿no cree usted que sería mejor pegarle primero los puñetazos, dejarla sangrando, y ya entonces pegarle las patadas? Muchas gracias.
Ramón: Sí bueno, ahora que lo dice la verdad es que sí, ¿no? Pero claro, tenga en cuenta que en esos momentos uno no se para mucho a pensar ¿no? Estás ahí venga a pegar, venga a pegar y no piensas...
Presentadora: ¡Bueno, Ramón y Rosalía, y ustedes en casa, nos tenemos que ir que el tiempo se nos acaba! ¿Queréis decir algo alguno de los dos? ¡Ah, sí, se me olvidaba! Rosalía, dinos cuál era la respuesta correcta, ¿con qué te suele pegar Ramón?
Rosalía: Ah, sí, bueno, él me pega sobre todo con el bate de béisbol, aunque con el martillo también me pegó alguna vez, que conste.
Ramón (con sonrisa picarona): Sí, jeje, alguna vez...
Presentadora: ¡Bueno, Ramón y Rosalía, muchas gracias por haber venido a contarnos lo patéticas que son vuestras vidas! ¿Lo habéis pasado bien?
Ramón y Rosalía: Sí, muy bien.
Presentadora: ¡Me alegro! ¡Bueno, queridos amigos, esto ha sido todo por hoy! ¡Espero que hayáis disfrutado en casa con las tragedias de esta gente y enhorabuena al ganador del concurso! ¡Y a los que estáis en casa, no nos cansamos de repetíroslo: si queréis venir al programa a alegrarnos con vuestras desgracias, no tenéis más que llamar al número de teléfono que aparece en panatalla, y explicarnos lo triste y trágica que resulta vuestra historia! ¡Nosotros estaremos encantados de escucharos para que nos podáis hacer pasar un buen rato con vuestras sandeces y miserias! La semana que viene volveremos con la historia de Alberto, un niño con cáncer a quien sus padres humillan llamándole "calvorota de mierda" y diciéndole lindezas tales como "ójala nunca hubieses nacido, cancerígeno de los cojones!". ¡Buenas noches a todos! ¡Hasta pronto!.

lunes, 18 de febrero de 2008

NEGOCIACIÓN POLÍTICA

ETA pidió por escrito una "negociación política" y el Gobierno accedió a ello. Así titula el diario EL MUNDO su portada de hoy, lanzando un hueso más al perro de esa derecha política deseosa de conflicto.
Y es que esa derecha se lleva las manos a la cabeza al oír hablar de "negociación" con ETA, pero como esa negociación sea encima "política", el cabreo alcanza cotas inimaginables. "!Una negociación política, por Dios, pero qué va a ser esto!". Vamos a ver, caballeros ¿a qué viene tanto alarmismo cuando hablamos de negociación "política"? ¿De qué otra forma puede ser esa negociación si no es política, me lo quieren explicar? Bueno, antes que eso, ¿qué entienden ustedes por negociación? Tenemos que aceptar que nos encontramos ante un conflicto de carácter político, no de carácter social. Los etarras no son cuatro matados que no tienen nada mejor que hacer que poner bombas contra policías, guardias civiles, y diputados del PP y del PSOE "porque sí". Su actividad no es comparable a la de los asesinos en serie que matan por "vete tú a saber qué razones". Las razones que mueven a los etarras a realizar sus fechorías se encuentran en el ámbito político: buscan la independencia y la constitución del Estado de Euskal Herria, que se les niega a través de la represión (porque no recuerdo ningún referéndum de autodeterminación en el País Vasco que haya salido favorable a la permanencia del País Vasco en España, y que por tanto les niegue dicha independencia por cauces democráticos), y responden a esas acciones de represión por parte del Estado español con atentados.
Estamos pues, ante un conflicto de carácter político, por lo que la negociación no puede ser de otra forma más que política. Desconozco lo que entiende la derecha por negociación. ¿Qué quieren? ¿Que los terroristas dejen las armas y acepten pertenecer a España "porque sí"? ¿De verdad lo esperan? Joder, a mí también me gustaría que un día apareciesen tres encapuchados (quizá ya sin pasamontañas) en la televisión emitiendo un comunicado en el que dijesen que dejan las armas porque se han aburrido de jugar a los pistoleros, y ahora prefieren dedicarse a la oración en un monasterio, pero sabemos que no va a ser así. Podría serlo quizás si matasen por matar, pero, repito, las causas de sus acciones son de carácter político, no social; por lo que la negociación entre el Gobierno y la banda ha de ser necesariamente política y el precio (sí, el precio, porque se pagará un precio) que paguen ambas partes será también político. No hay más.

jueves, 14 de febrero de 2008

CARTA DE ALGUIEN A SAN VALENTÍN


Estimado San Valentín:
Gracias por darme a entender que soy una mierda de novio si no le demuestro cuánto le quiero comprándole ese perfume tan caro, a cuyo precio no alcanzo con mi mierda de sueldo.
Gracias por recordarme que si no le compro esa corbata que a él tanto le gusta, debería replantearme si soy la más indicada para estar con él.
San Valentín, gracias por recordarme que mi marido me pega.
Gracias por recordarme que mi mujer se fue con otro y se llevó a los niños, y ya no les puedo ver tanto como antes.
Muchas gracias por recordarme que mi marido está lejos, buscando trabajo porque en mi país nos moríamos de hambre, y ni siquiera sabemos si sigue vivo.
Gracias por recordarme qué profesión ejerce mi mujer allí en España para lograr sacar algo con lo que alimentar a nuestra hija, porque yo desde la cárcel no puedo hacer nada.
Gracias por recordarme que mi chica me los pone con otro, el cual le compra más cosas y más cosas tiene, por lo que "mola" más estar con él.
Gracias por recordarme que a mi novio le gusta más ésa, que es más guapa y tiene mejor cuerpazo, por eso ahora queda con ella, y no conmigo.
Gracias San Valentín por recordarme que si no voy con ella a ese restaurante extremadamente lujoso y no le compro ese collar de perlas que tanto desea, es porque no soy un buen marido, y porque nunca lo he sido durante todos estos años de matrimonio.
Gracias por decirme que debo invitarle a la ópera, y comprarle ese traje de precio muy alto, pues si no ¿cómo le iba a agradecer todo lo que él ha hecho por mí durante todo este tiempo?
Por todas estas cosas, San Valentín, quiero darte las gracias, pero sobre todo quiero dártelas por algo en concreto...
...
...
...
...
Gracias por recordarme que estoy SOLO, y que no tengo a NADIE.

martes, 12 de febrero de 2008

VOTAR O NO VOTAR, HE AHÍ LA CUESTIÓN

Señoras y señores, ¡se acercan las elecciones! Las paredes del metro están llenas de propaganda política, en la tele nos bombardean con imágenes de distintos mítines, los periodistas de derechas sueltan gilipolleces sobre Zapatero, los periodistas de izquierdas hacen lo propio con Rajoy, en definitiva: hay ambiente de campaña electoral, y he de reconcerlo: ME GUSTA.
Se me plantea, por primera vez en mi vida, el siguiente dilema: ¿Votar o no votar?
Si voto, estaría legitimando un sistema que no me gusta, pues soy partidario de la democracia directa, creo que las decisiones deben ser tomadas desde abajo y no desde arriba, y la democracia representativa me parece una estafa. Pero claro, si no voto y gana el PP me sentiré culpable, me costará quitarme esa vocecilla malévola que me repetirá una y otra vez algo así como: "¿Lo ves? ¡Mira lo que has conseguido con tu tozudez de no ir a votar! ¡Ha ganado el PP, y si hubieras ido a votar no habría pasado ésto!". Lo que digo: Un dilema gordo.
Lo cierto es que si gana Zapatero, estaría contento porque eso querría decir que Rajoy ha perdido, aunque a la vez estaría triste (pero que muy triste), ya que supondría la permanencia en el gobierno de un partido prácticamente idéntico al PP, al menos en el tema de los impuestos. No obstante, todo hay que decirlo, la alegría sentida a raíz de la derrota de Rajoy me daría pie para pensar: "¡uf!, ¡de la que nos hemos librado!", y contrarrestaría la tristeza surgida a partir de la victoria de ZP. No sé. Sea como sea, roguemos por que no salga el PP. Si vais a votar, no votéis al PP, pensad en los ciudadanos.
Tampoco quería hablar de las elecciones sin mencionar un tema que sale a la palestra al instante con esto del "votar/no votar": los apolíticos. Esos que pasan de votar "porque los políticos son todos iguales, prometen mucho y no hacen nada, bla, bla, bla,...". No me parece una posición correcta esa de los apolíticos, ya lo dejé (o intenté dejarlo) claro en una entrada anterior. No creo que se deba renunciar a la política, que es lo que te hace diferente del resto de los animales, por el simple hecho de que quien se dedica a ella no ejerce correctamente su función. No obstante, esto no quiere decir que todo aquel que no vote cuenta con mi rechazo por ser apolítico. Hay cierto sector de la sociedad que no vota y, sin embargo, se les puede acusar de cualquier cosa menos de apolíticos. Sí amigos, a esos me refiero: a los anarquistas. Los anarquistas no van a votar porque cuestionan el sistema actual, no están de acuerdo con el Estado, y consideran que participar en sus elecciones sería legitimarlo. Sería legitimar aquello que quieren destruir, por lo que a simple vista no tiene ninguna lógica considerarse anarquista y participar en los comicios. Éstos no van a votar, pero, a diferencia de los apolíticos, no cuentan con mi rechazo, pues están metidos en política como los que más, de otra forma si se quiere, pero están metidos, incluso más metidos que el resto de la población, me atrevería a decir.
Por lo tanto, si se vota, que se vote a cualquiera menos al PP; y si no se vota, que sea porque se tienen ideales anarquistas, no porque se sea un pasota anti-todo mega-guay.

sábado, 9 de febrero de 2008

LA DERECHA Y LA INTEGRACIÓN DE INMIGRANTES

"El PP completa su oferta en inmigración con un «visado por puntos». El objetivo es dar prioridad a los trabajadores más cualificados y a los más necesarios para la economía española" (ABC, 9-2-08).
O sea, que los inmigrantes van a entrar en España según sean productivos o no. Va a ser como una especie de elección a la carta: "Tú me vienes bien, tú no". El inmigrante no será ya un ser humano, sino que será mercancía, la cual será aceptada según sea rentable o no. Y si, siendo usada durante un tiempo, no es rentable, la mercancía será devuelta a su país de origen, "¡de donde nunca debió salir!".
Miedo me da esta propuesta de Rajoy. Les va a hacer firmar un contrato de integración. Vaya, me pregunto si en ese contrato de integración Rajoy va a garantizar que no se van a formar guetos. Porque desde luego, lo que está haciendo su amiguita Esperanza Aguirre en Madrid favoreciendo la enseñanza privada en detrimiento de la pública es de todo menos integración de inmigrantes. Cuando oigo a la derecha hablar de integración de inmigrantes siento pavor. ¿Vosotros habláis de integración? ¡¿Vosotros precisamente, pandilla de sinvergüenzas?! ¿Vosotros, que lleváis a vuestros hijos a los colegios privados para que no se junten con la chusma inmigrante, obrera y barriobajera? "Sí, sí, si lo de la integración está muy bien, los inmigrantes se tienen que integrar. Ahora bien, mi hijo no va a un cole con inmigrantes porque dan muchos problemas..." ¿Vosotros, que no permitís que vuestros hijos jueguen con inmigrantes, sois los que habláis de integración? ¡¿Vosotros, que ponéis cara de preocupación cuando os mencionan la palabra "inmigrantes", pero que luego tenéis una chacha rumana en casa limpiando la mierda que vosotros dejáis, sois los que habláis de integración?! ¡¿Pero a quién pretendéis engañar?! ¡Qué coño sabrá la derecha de integración, si es la primera que se muestra favorable a la formación de guetos y al clasismo! "Sí, sí, que los inmigrantes se integren, pero NO con mi hijo". "Buf, chica, es que los inmigrantes dan unos problemas...". ¡Pero luego bien que tienes chacha inmigrante, hija de puta!
Desde luego, no sé muy bien qué sentir ante esta propuesta de Rajoy, si miedo o asco.
Recomiendo FERVIENTEMENTE ver este vídeo.

viernes, 8 de febrero de 2008

IMPUESTOS Y ESFUERZO

El impuesto sobre la herencia es aquél que pagamos cuando fallece una persona y nos deja sus bienes. Como no podía ser de otra forma, los liberales se oponen a él, no ven justo que haya que pagarlo.
Imaginemos que mi padre tiene 11 pisos distintos. En uno de ellos vivimos nosotros: mis padres, mis hermanos y yo; y los otros 10 los tenemos alquilados a 700€ al mes (creo que el alquiler medio en España es incluso más). Si no me he equivocado al multiplicar, esos 10 pisos alquilados le generan a mi padre un beneficio de 7.000€ al mes. Cobrando 7.000 pavos al mes no se puede decir que se viva mal, tendríamos toda clase de bienes y servicios, incluso podría mi padre comprar más pisos para ponerlos en alquiler y sacar más dinero. Y con ese dinero que sacara podría comprar más pisos y volverlos a poner en alquiler y sacar todavía más dinero. Y con esa cantidad de dinero comprar más y más pisos, alquilarlos, y sacar todavía más dinero, y así sucesivamente, en una rueda de riqueza eterna. Pero lo mejor no es ésto, lo mejor es que si quitan el impuesto sobre la herencia, cuando mi padre la palme seré yo quien posea todo ese imperio de pisos. No tendré necesidad de trabajar, porque ya viviré de las rentas que me ofrece el alquiler de todos esos pisos. Esa riqueza será para mí, y será todavía mayor, con lo que me iré haciendo cada vez más rico. Y más rico que me haré si encima me quitan el impuesto de patrimonio. Además, del mismo modo que yo habré heredado de mi padre, mi hijo heredará de mí, y mi nieto de éste, con lo que mi familia será eternamente rica, y lo que es mejor aún: sin trabajar, viviendo de las rentas.
Vemos así, que la eliminación del impuesto de patrimonio y el impuesto sobre la herencia hace que haya gente rica que no da un palo al agua. Y lo más curioso es que los mismos liberales que se llenan la boca con eso de que "se tiene que premiar el esfuerzo de quien ha trabajado para hacerse rico...bla, bla, bla..." son los que defienden que esta situación de "darse la gran vida" sin mover un dedo es justa. Lo que vienen a decir los liberales es que hay que valorar el esfuerzo, pero también hay que tolerar que yo pueda vivir de las rentas que he heredado de mi padre, es decir, de las rentas que NO he conseguido con mi esfuerzo, ¡tócate los pies!
Si de verdad los liberales valorasen el esfuerzo del individuo, un discurso coherente sería aquél que promoviese que cada persona empezase más o menos de cero, ya que de lo contrario siempre habría ricos y pobres, y la competencia sería desigual. Entonces, vemos que los mismos liberales que están en contra de los monopolios y de la competencia desigual son los que la promueven, y vemos también que se equivocan al decir que el capitalismo reduce las diferencias entre ricos y pobres. Quizá las reduzcan (cosa que dudo muchísimo), pero no las eliminan. La existencia de ricos y pobres es necesaria para que el capitalismo pueda funcionar, pues alguien tiene que tener los medios de producción (ricos), y alguien tiene que hacerlos funcionar (pobres).
Señores, los impuestos de sucesiones y donaciones y sobre el patrimonio son justos y necesarios, es una lástima que tanto PP como PSOE (que se supone socialista) quieran quitarlos. ¡Que los paguen los ricos, y que los liberales dejen de tocar las pelotas, maldita sea!

lunes, 4 de febrero de 2008

LOS PREMIOS GOYA Y LA DERECHA POLÍTICA

Anoche fue la gala de los Goya. Este artículo no pretende ser una crítica de tal evento, ya que el autor no entiende demasiado de cine (para informarse sobre cine recomiendo visitar La última butaca), sino una crítica (destructiva) hacia la derecha más recalcitrante bajo mi punto de vista, esa derecha que se somete cada mañana a "Jiménezlosantosterapias", y que, ante la incapacidad para elaborar ideas y argumentos propios, repite como una manada de zombies lo dicho por Federico Jiménez Losantos.
Hoy, navegando por Libertad Digital, me he encontrado con ésta noticia: "El Goya al Mejor Actor pide "disolver esa cosa llamada Conferencia Episcopal". Como no podía ser de otra forma, la derecha ha arremetido contra Alberto San Juan (a la vista del titular, parece que ni siquiera sabían el nombre del premiado) por el simple hecho de expresar su opinión con respecto a los "pederastas provocados".
Los redactores de Libertad Digital califican la gala de "plataforma política para la promoción implícita del voto al PSOE", y dicen que es un "escaparate del lujo y la vanidad más exclusivos con el pretexto del arte". Dejando de lado que eso de "promoción implícita" queda un poco mal en el vocabulario de cualquier periodista que se precie, pues confiere una subjetividad espectacular al texto; si pedir la disolución de la conferencia episcopal es hacer promoción del voto al PSOE, yo soy cura (nunca mejor dicho). Cuando el PSOE se quite de encima esos acuerdos que el Estado español mantiene con el Vaticano, o ese trato de favor hacia la religión católica, podremos hablar de promoción implícita, pero hasta entonces no podremos hacerlo. Y eso de "con el pretexto del arte", ¿a qué viene? ¿qué consideran los liberaluchos "arte"? ¿Los libros de Pío Moa? ¿Los de César Vidal? ¿El asesinato de una animal en una plaza de toros?
Pero sin duda, lo que más llama la atención son los comentarios de los lectores del panfleto digital. Muchos de ellos se llevan las manos a la cabeza, porque el cine español está subvencionado por el Estado. Sin embargo, no hacen lo propio ante las carantoñas que éste le hace a la Iglesia Católica (sí, los pederastas), o a las corridas taurinas.
Además, es curioso que digan por un lado que el cine español es malo y, por otro, digan que no van a verlo porque prefieren hacerle "boicot". Vamos a ver, caballero, si usted no ha visto el cine español en su vida, ¿en qué se basa para decir que éste es malo? Me pregunto si esta gentuza habrá hecho un cursillo de crítica cinematogáfica y su opinión tiene un cierto fundamento, o simplemente critican la cultura española por el hecho de que es contraria a sus ideales políticos.
Alguno de estos fachas redomados me dirá que es una atrocidad considerar la bazofia del cine español "cultura". Yo le respondería que: "bueno, también hay quien considera a Libertad Digital "información", después de todo. En fin, cuestión de términos.

viernes, 1 de febrero de 2008

LIMPIA LO QUE YO HE ENSUCIADO

Reciclar es bueno. Está bien que el ciudadano sea consciente de que no puede permitir que su planeta se llene de mierda. Está bien que separe sus residuos en orgánicos e inorgánicos, que tire las pilas donde tiene que tirarlas, y no en cualquier lado. Es admirable que tire el papel y el cartón en un contenedor distinto del de restos orgánicos, y también que tire los cascotes de vidrio en uno diferente al de los envases.
Se debe aplaudir que el ciudadano elija moverse en transporte público, y más si éste funciona con gas natural; así como que no malgaste energía teniendo luces innecesarias encendidas en casa.
Bien por el ciudadano que se ducha en vez de bañarse, bravo por el ciudadano que cierra el grifo mientras se lava los dientes, tres ¡hurras! por aquél que llena el lavavajillas y la lavadora antes de ponerlo/a en marcha.
Viva el ciudadano que recicla el papel una vez que lo ha usado para volverlo a utilizar.
Está además muy bien que desde las administraciones se hagan campañas hablándonos a los ciudadanos de lo bueno que es ser un ejemplar ecologista: "Los cartones al azul, los vidrios al verde, los envases al amarillo,...".
Pero señores, no nos engañemos. Planteémonos el porqué de la necesidad de ser un buen ecologista. Las administraciones, el Gobierno, el ministerio correspondiente, nos dicen que debemos proteger nuestro medio ambiente, que sólo tenemos uno y hay que cuidarlo, pero no nos explican por qué el planeta está lleno de mierda, no nos explican la razón por la que toda esa suciedad y porquería existe en nuestro medio ambiente como un elemento más del paisaje. No nos explican que su capitalismo salvaje es el que llena los océanos de residuos tóxicos. No nos explican que su industrialización desmesurada ha envenenado la atmósfera por medio de sus fábricas. En definitiva, nos dicen que debemos preservar nuestro medio ambiente, pero no nos dicen que son precisamente ellos los que contribuyen a joderlo. El capitalismo nos llena el planeta de mierda y después nos manda recogerla, forzando la emergencia de un sentimiento de culpabilidad en todos nosotros si no reciclamos.
¡Hay que joderse! El Estado nos pide a los ciudadanos que no contaminemos, cuando él está concediendo licencias a distintas empresas para montar fábricas que llenan el aire de mugre y vierten sus residuos tóxicos en las aguas convirtiéndolas en putrefacción líquida. Y si se pretende que la empresa en cuestión ejerza su actividad económica con arreglo a valores ecológicos y un crecimiento sostenible, ¿qué se hace?...¡Se le conceden subvenciones! ¡Diablos!, que me den subvenciones también a mí, que tiro las pilas en las marquesinas del bus, tiro los cartones al azul y los vidrios al verde.
Esa es la hipocresía del desarrollo sostenible que nos venden por la televisión: "Lleno tu casa de mierda y te ordeno recogerla. ¿Que no la recoges? Eso es porque eres un mal ciudadano".
Recomiendo escuchar:

La Polla - Bandejitas, latas y paquetes
Cristal y carton, peladuras, plasticos y tetrabricks
bandejitas, latas y paquetes.
Pilas de botón, bombonas, cables y botes de spray
guantes de goma y bidones.
Tirar las botellas en el verde, los papeles al azul,
los plastiquitos en el amarillo y los restos de comida al gris,
te convierte en un ecologista.
Despues de cobrarte el casco,
quieren que se lo devuelvas,
pa que vuelvas a pagarlo
Cuando el mundo es un puto cenicero
y nosotros las colillas que hay dentro
alguien saca dinero a la basura,
roba el ultimo negocio a los pobres
y los tira al vertedero.
Los mismos que lo han jodido todo
te dicen que recojas la mierda
¡¡Hermanos!! ya no nos queda nada
¡¡nos vemos en el ojo del culo!!
Ya no me creo nada
y lo voy a llenar todo de mierda
¡¡Redios!!